Antonio María Pucci, presbítero

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    Nació en la provincia de Florencia, el 16 de abril de 1819. Fue bautizado con el nombre de Eustaquio, que cambió a su ingreso en los Siervos de María del Archicenobio de la Annunziata de Florencia. Terminada su formación teológica, fue ordenado sacerdote el 24 de septiembre de 1843. Ese mismo año fue destinado como coadjutor, y, luego, como párroco, a la iglesia de San Andrés de Viareggio. 

    Podemos concretar las características principales de su actuación pastoral en los siguientes aspectos: en primer lugar fue un renovador de la acción pastoral. Convencido de que, para cada categoría de fieles, era necesaria una pastoral adecuada, reformó las organizaciones existentes y creó otras nuevas. 

    Consciente de la poca instrucción religiosa de los fieles, fundó para los jóvenes la Congregación de la Doctrina Cristiana y la Compañía de San Luis. 

    Dedicó gran interés a trabajar en el complejo campo de las Hermandades. Sobre todo, procuró que estas no limitaran su actividad a vivir en el interior de su propio grupo, sino que buscó para ellas un sentido eclesial y comunitario amplio. 

    Descubrió el papel importante de las madres en la educación religiosa de sus hijos. Por eso, en 1882, fundó una Congregación de madres cristianas, con la que procuró aproximar a éstas a la vida de la parroquia. 

    Fundó también las religiosas "terciarias" Siervas de María, para la educación de las jóvenes. 

    Aspecto fundamental de su experiencia fue la dedicación caritativa a los pobres, así como su gran preocupación misionera. 

    Aquejado de una pulmonía después de socorrer a un enfermo, murió, tras una breve enfermedad, el 12 de enero de 1892. Fue beatificado por Pío XII y canonizado por Juan XXIII. Listado completo de Santos